El colectivo de Costas cambió de volante

Publicado por: Magenta Sport On 22:24

Alianza es un buen equipo de fútbol. Costas hizo una revolución a partir de un colectivo de presión constante y agresividad permanente, que se sabe y siente protagonista. Más allá de números, puntaje perfecto y mayor cantidad de goles, los blanquiazules superaron a sus rivales de la Copa primero en el desarrollo del juego y luego en el marcador.

Equipo serio y seguro en defensa, equilibrado y dinámico al medio y eficaz y categórico en ataque. Aunque la variante primordial fue en el ombligo del campo. Los partidos se definen en las áreas pero se elaboran en mitad de terreno, allí se piensan, construyen, cimientan, y los aliancistas dieron lección de su fútbol de siempre con los rigores de hoy. Al toque le sumaron ritmo, a la técnica, movilidad y a la posesión de balón, orden.

Hay que saber ocupar la cancha. Tener un equipo corto con las líneas una cerca de la otra. Hay que imponerse en todo el ancho del campo, pero principalmente los costados porque allí surge la mayor cantidad de situaciones de anotar. Lo contrario sería centralizar el juego. Cualquier estudio que se realice sobre los goles en cualquier torneo revela que el 50% tiene su origen en los extremos.

Costas cambió la distribución de sus mediocampistas. Le quitó protagonismo a Montaño, desarrolló el espíritu colectivo y acertó con Tragodara y Sánchez por las puntas y Quinteros y González por dentro. Volantes con nivel físico, intensidad para la recuperación y dinámica para la circulación. Ahora se juega a otra velocidad, pero el secreto está en correr bien y avanzar con la menor cantidad de toques. Cuanto menos se tenga el balón, mucho mejor.

El paraguayo González es el referente del nuevo estilo. Un medio moderno, inteligente para la marca, práctico para la entrega y solidario en apoyo. Juega y no deja jugar. Es el futbolista que no tiene la selección. Quinteros es el complemento ideal, aunque le falte resto para los noventa, y Tragodara y Sánchez cumplen con el recorrido del largo del terreno. Cuando mejoren su lectura del juego, tendrán mayores ocasiones para convertir.

Alianza emociona y entusiasma. Más allá que todos aguardan final feliz, entendió lo que había que hacer para la alta competencia. Después de perder las finales algunos radicales querían cambiar a Costas. No era solución. Era Costas quien tenía que cambiar.

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